El hipertiroidismo es una de las enfermedades endocrinas más comunes en gatos mayores de 8 años. En más del 99% de los casos, está causado por un tumor benigno en la glándula tiroides, que hace que esta produzca hormonas en exceso. Cuando esto ocurre, el metabolismo del gato funciona a una velocidad anormalmente alta, lo que afecta negativamente a los órganos del animal. En este artículo te explicamos qué deberías saber sobre el hipertiroidismo en gatos.
¿Cuáles son los síntomas del hipertiroidismo?
El síntoma más común es la pérdida de peso, a pesar de que el apetito aumenta. Otros síntomas pueden ser los vómitos y la diarrea e incluso hiperactividad. En algunos casos, más extremos, el gato sufre un aumento de la presión arterial, con todos los riesgos que ello conlleva.
Debido a ese aumento de la presión arterial, el corazón debe bombear más rápido y con más fuerza, ensanchando sus músculos, agrandándose y, finalmente, fallando. Por eso es tan importante realizar un control cardiaco mediante ecocardiografía.
¿Cómo se diagnostica el hipertiroidismo en gatos?
Un veterinario puede sospechar que el gato tiene hipertiroidismo basándose solo en los síntomas y palpando la glándula tiroides agrandada en el cuello del animal. Para confirmar el diagnóstico, se suele hacer un análisis de sangre que mida el nivel de las hormonas tiroideas.
El tratamiento más común es una dieta específica y fármacos que se administran diariamente, aunque el tratamiento de elección sería terapia con yodo radiactivo en centros especializados. La cirugía es otro tratamiento a tener en cuenta.
Si crees que tu gato puede padecer hipertiroidismo, o te preocupa su salud, acude al veterinario de inmediato. ¡Te quedarás más tranquilo!